viernes, 6 de octubre de 2017

De vuelta en aquel escenario

Hace unos días atrás volví a subirme a un escenario muy especial…
Hacía más de 10 años que no actuaba allí, que no lo pisaba mientras me movía por él; mientras sentía la luz de los focos y los aplausos del público…
Y es que no parece que hayan pasado 10 años, sino mucho más. Aunque por un lado lo recuerde cómo si fuera ayer cuando me subía con pasos tímidos al escenario, cuando bailaba sobre él con la cabeza agachada por miedo de mirar a los demás.
Todo ha cambiado tanto desde entonces…
Después de este largo tiempo he aprendido tantas cosas…
He aprendido a pisar fuerte el escenario, a mirar de frente para que sientan lo que yo siento, para que vean que no tengo ningún miedo… he aprendido a disfrutar de lo que se me da mejor en esta vida.
Por eso, para mí; volver ahí era importante y especial. Porque no es cualquier escenario…
Realmente ganar o perder el concurso al que me presenté me daba igual, y lo digo con total sinceridad. Quedé tercera, pero yo me sentí ganadora por haber podido estar ahí arriba sintiendo la música fluir por mi cuerpo, volviendo por un momento atrás en el tiempo; transmitiendo lo que me hacían sentir los recuerdos añejos…
Y por supuesto, quiero dar millones de gracias a las personas que me apoyaron y me animaron desde abajo, que vinieron explícitamente a verme aquella noche. Porque para mí era muy importante que ellos estuvieran y me vieran bailar. Gracias de todo corazón porque sin ellos yo no hubiera llegado hasta aquí, sin ellos yo no sería lo que soy ahora.
Aun así todavía faltó gente que me hubiera gustado que estuviera. Ciertas personas del presente y del pasado que tendrían que haber estado para que mi sueño estuviera completo.
Pero espero que algún día pueda conseguir que todos ellos estén frente a mí…
Realmente, ese es mi mayor sueño.
Por encima de bailar profesionalmente y de montar una academia; lo que quiero desde lo más profundo de mi corazón es bailar algún día delante de todas esas personas, o al menos la gran mayoría, que han influido en mi camino desde que era una niña de una manera u otra. Pero sobre todo, las personas que me dijeron que no, que me obstruyeron el paso, que no me dejaban avanzar, que me quisieron ahogar, que nunca creyeron en mí…
Y así poder demostrar que fui fuerte, que luché hasta el final por mis sueños, y que la que gana al final soy yo.

Prometo que ese día llegará tarde o temprano. Ese día, pisaré el escenario más fuerte y con más ganas que nunca. Y en ese momento, seré la persona más feliz de todo el planeta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario