Corro en todos los sentidos
parándome en todas las esquinas.
Vuelo sin un concreto destino,
busco todas las posibles salidas.
Me pierdo hoy
y me encuentro mañana.
En la luna estoy,
soñando en mi cama.
Una vida descontrolada
sin freno alguno.
Una vida por todos deseada
donde el miedo es nulo.
Puedo saltar tan alto,
hasta tocar las estrellas.
Puedo gritar tanto,
pues mi voz no tiene espera.
A las siete estaba en Londres
y a las ocho en China.
Inténtalo tu también sin medidas
yo quiero que lo logres.
Pues es tan grande la libertad
que no podrás dejar de soñar.
